¿Por qué les molesta #nolesvotes?

Hay nueva bronquilla entre los blogueros españoles, again. Está relacionado con la Ley Sinde, again… ¿alguna vez se fue? No me importa si así fue.

Esto procede de la aparición del, llamémoslo movimiento #nolesvotes, y la crítica que Roger Senserrich hizo al mismo en su blog. De nuevo tenemos por un lado a Senserrich, Galindo y su tropa, contra Dans, Gallir y la suya. Yo la verdad es que tengo simpatía cero por todos ellos, no suelo estar alineado con ninguno y no les admiro. Dicho esto, yo tengo mi opinión al respecto.

Porque yo APOYO a #nolesvotes. Para mí es extraordinariamente fácil, es lo que llevo haciendo toda mi vida: no votar al PSOE, PP y CIU. Por lo tanto una propuesta así es apoyada por mí en el 99% de los casos. Antes de que existiera #nolesvotes, yo ya no les votaba… ni les votaré.

Para mi post me voy a basar en los de Senserrich y Galindo al respecto, además de otro de Gallir para elaborar lo más brevemente posible mi opinión. Son estos:

Yo sí que voto

Reiterando: los errores de «no les votes»

Sobre nolesvotes.com: porqué no me parece buena idea

Disculpas por apoyar a #nolesvotes

La respuesta a la pregunta que planteo en el título es corta y concisa, podría terminar el tema en una sóla frase. ¿Porqué Senserrich y su pandilla están contra #nolesvotes? Porque son partidarios de la Ley y porque esta acción va contra el partido al que apoyan. Y punto, no hay más. Lo demás es retórica de politólogo, que se diferencia principalmente del gilipollas clásico en que el primero tiene muchísimo más tiempo para perderlo disertando sobre la cría del berberecho en cautividad o el último capítulo de Lost sin que se note que no tiene ni puñetera idea y haciendo refritos de otros. El que conozca las facultades de Ciencias Políticas sabe a qué me refiero. Por lo tanto todo lo que desarrollan en sus post es símplemente es el vano intento de que no se les note que la Ley les gusta en su fondo y quien la promovió aún más.

First of all, el título del primer post de Senserrich empieza bien. Si él vota o no vota nos importa lo mismo que si caga en un frasco o se hace el camino de Santiago en motocarro. Ya sabemos que vota y con quien simpatiza. Por ello vuelvo a la síntesis del tema: #nolesvotes critica lo y a lo que él apoya.

El primer aspecto que intenta desarrollar Senserrich es el de la propia Ley. Si extraigo afirmaciones suyas de los post para quien se haya ahorrado leerlos antes de seguir nos queda claro:

Hace unas semanas, tres partidos españoles pasaron una ley increíblemente poco ambiciosa que coloca los niveles de la protección de la propiedad intelectual en España a un nivel vagamente equiparable a la de nuestros vecinos europeos. Es una ley mucho más permisiva que las aprobadas en Francia, Italia o Estados Unidos, países que tienen un sector de empresas de internet infinitamente más vital y vibrante que el nuestro.

Es una ley más, una reforma pequeña. Una copia débil y fofa de leyes de otros países europeos; en un país con un 20%, es algo que debería ser una nota a pie de página en un periódico cualquiera. En España, sin embargo, la cosa no es así. Tras casi tres años de recesión y estancamiento económico, el paro juvenil al 40%, una generación perdida y demás, los valientes activistas de la red no han dicho ni pío. El gobierno, sin embargo, ha tocado el sagrado derecho a distribuir lo que no es mío, y la hemos armado pero bien.

Igual que Ana Botella para minimizar el asunto de la mala calidad del aire en Madrid aludía al paro, Senserrich y su tropa pueden mezclar el paro con la Ley Sinde, pasando por la demagogia derrotista hispana del 98 de que los demás países molan y en España somos gilipollas. Si en España no existe un sector de empresas de internet como en USA, para solucionarlo lo que nos sobran son politólogos sabelotodo.

Además intentan vanalizar la importancia de la Ley, mezclándola de nuevo con paro. Gallir en esto ha dado una buena explicación, un movimiento contra estos partidos podía haberse dado por cualquier circunstancia, hasta porque los candidatos nos parezcan feos. Pero hay algo que el señor Senserrich y su gente quieren obviar. Que cada uno elegimos qué nos parece importante o relevante en nuestra vida, y nuestra decisión es tan respetable como cualquier otra. Enterados como estos politólogos, sociólogos y otras hierbas tienen la fea costumbre de querer decirnos a los demás qué es y que no es importante en nuestra vida. Si este tipo tuviera un perro y se le muere a mí me importa un pimiento, pero entendería que él lo sintiera. Por ello, si una Ley que afecta en mucho o poco el mundo de internet produce una reacción buena o mala y con cierto número de seguidores en la red es de lo más normal del mundo. Lo que trata la Ley Sinde es importante en internet porque trata algo relacionado con ello y así lo consideran muchos de los habitantes de la red. Lo que no sería normal es que con la aprobación de la Ley Sinde un grupo de agricultores del Penedés asaltaran la Lehendakaritza. Eso yo tampoco lo comprendería, pero que miles de internautas se acuerden de las madres de los integrantes y simpatizantes de estos tres partidos es de lo más normal. Sea porque no les cierre un blog por incluir un vídeo en él como hago yo o porque me quiera ver Padre de Familia en SeriesYonkis. Si esto incluye a Senserrich, como dice mi madre: haber estudiado hij@.

Otro argumento en el que se basa esta gente es la nueva versión del voto inútil en su versión 4.523b beta. Es la constante apelación que hacen los progres de blackberry cuando llegan las elecciones, a saber: que viene la derecha, votar a minoritarios o no votar es tirar el voto, la pinza… Si uno analiza sus post y los comentarios de quienes habitualmente les jalean se vuelve a confirmar mi diagnóstico. Les molesta que se pida no votar a su partido. Por eso sus escritos y los comentarios insertados suelen desprestigiar a Izquierda Unida o a Unión Progreso y Democracia. Si Jorge Galindo no entiende que IU nunca va a estar de acuerdo con Florentino Felgueroso y considera inadecuado que no lo haga allá el. Unos intentan hacer una política con sus ideas y otros intentan ganar elecciones para no se sabe bien el qué. Es otra de las diferencias entre los partidos a quienes desprestigian constantemente y el núcleo duro de los progres de blackberry. Los que habitamos por la red sabemos perfectamente quienes son los más críticos con esos dos partidos. Sí, son los progres de blackberry, defensores del obrero desde sus chalets en urbanizaciones privadas.

Ese es otro aspecto, el partidario. Hacer entender que la verdadera izquierda y los del chiringuito están detrás de esta iniciativa. A nadie nos sorprende que, al menos simpatizantes de los partidos que no han aprobado la Ley sean de los miembros y miembras más activos de #nolesvotes. Esta iniciativa está hecha por la más o menos la misma gente que estuvo contra Ley y que en unos casos estará politizada y en otros no. No se dirige el voto a nadie, sólo se dice que se use el voto en consecuencia a los hechos acaecidos. Si con esto Cencerrik quiere atribuir la autoría al club de fans de Cayo Lara es su problema. También quieren hacer creer que desde #nolesvotes se intenta fomentar la abstención. A poco que te informes te das cuenta de que esto no es cierto. Además acusan de que pretende o puede conseguir un efecto abstencionista, para desmentirlo días después. Independientemente de esto, la gente si quiere abstenerse que lo haga. Es su voto y es tan válido como el de Senserrich. Para esta gente hay que votar, aunque sólo se presentaran Hitler y Stalin a unas elecciones. Si no lo haces entonces no puedes opinar, porque no votaste al nacionalsocialismo o al comunismo.

Otro aspecto más es el intento de que papá nos diga a los niños cuál es el modelo de participación en política que debemos tener los ciudadanos. Senserrich y sus esbirros parecen no querer aceptar que el primer y básico modo de participación es el voto individual. Aunque intente dulcificarlo en sus posteriores textos. Si no te afilias a los partidos no participas en la vida política de un país. Pero por suerte o desgracia es mejor manera de participar en la vida política el votar que el pertenecer a un partido. La democracia se sustenta en el voto y no en los partidos. No existe democracia sin lo primero y puede continuar sin lo segundo.

El argumento final que analizo es el de que «no servirá para nada», engarzado con aquello del voto inútil. Si todo movimiento, revolución o protesta hubiera partido de esa premisa seguiríamos bajo los cánones de la Edad Antigua. La invitación a hacer las cosas bajo el paraguas del sistema puede estar muy bien… o no. La mayoría de los grandes cambios en el mundo no se hicieron por el buen rollito. En los países árabes no se están derrocando dictaduras siguiendo el sistema, sino a ostia limpia. ¿Esto tiene que ver con Egipto o Túnez? Para nada. Pero que Senserrich y sus mariachis no intenten hacernos creer que porque haya una manifestación en la Puerta del Sol la Sinde y la SGAE van a cambiar de opinión. Igual que Aznar siguió a su rollo cuando el pueblo estaba contra la Guerra de Irak. Vivimos en una partitocracia y la opinión de la ciudadanía sólo importa cada cuatro años. Por eso si una parte de la población, que utiliza internet, está en contra de una Ley que permite bloquear webs (con o sin razón), lo lógico es que o no voten a los partidos que aprobaron la Ley o directamente se líen a ostias con sus integrantes. Parece que a Galindo, Senserrich y a los neoprogres no les gusta.

Todo es darle vueltas a los dos mismos conceptos, están con el espíritu de la Ley y son neoprogres. Los neoprogres han tomado el control del partido progre y los medios progres. Bueno, realmente nunca lo han soltado, son los mismos de siempre. Por eso Senserrich y otros aluden a Escolar cuando quieren desprestigiar a #nolevotes. Es que Escolar, en su estilo y aunque haya sido uno de los mayores críticos con la Ley Sinde, cumple la premisa de ser un neoprogre o progre de blackberry. Por eso no entrará nunca en la Yihad que pudiera desencadenarse, no sea que mañana le peguen a diestra y a siniestra.

Así que yo sí apoyo a #nolosvotes porque, como dije inicialmente comparten mis objetivos. Ni voto al PP-PSOE-CIU, ni me gusta la Ley Sinde. Y si esto le jode a Jorge Galindo, a Roger Senserrich u otros pues que bailen. Si la iniciativa tiene éxito o no lo tiene se verá con el tiempo. Si lo tiene o no lo tiene quedará en nuestra conciencia que hemos hecho lo que queríamos hacer porque era en lo que creíamos. Yo sólo apoyo la propuesta, no formo parte activa de ella, aclaro. Lo mismo que supongo que suele hacer el politólogo todólogo. Y si esto no funciona, si en las municipales y autonómicas los tres partidos no reciben castigo (que sería lo probable), haremos lo que hemos hecho siempre:

http://www.youtube.com/watch?v=UWz8NHzW2U0

Aunque seamos pocos, aunque seamos tontos y aunque hagamos cosas inútiles.