¿Nuestra ideología coincide con nuestro voto?


Estaba consultando el último barómetro del CIS, esas cosas que se me ocurren a mí a veces, y me he encontrado con que se formuló una pregunta la cual me ha llevado escribir esta entrada. A los encuestados se les pregunta ¿Cómo se definiría Ud. en política según la siguiente clasificación? y se les da una serie de opciones para elegir. No son todas las que nos gustarían, pero es lo que hay. Además se le permite al encuestado una «ideología secundaria» que complemente su respuesta. ¿Cuál ha sido dicha respuesta?

Así a bote pronto parece que hay una relativa igualdad entre colectivos tanto para la primera opción elegida, como para la complementaria en su caso.

Por desgracia no existen cruces para las dos respuestas, o sea, no podemos saber si hay gente que se cree conservador-progresista, comunista-liberal o cosas así que nos podrían hacer gracia. Pero lo que sí nos ofrece el CIS es el cruce con el recuerdo de voto: podemos saber a quién votaron las pasadas elecciones y compararlo con su ideología política. ¿Cuáles son los resultados?

Como era de esperar el grueso de votantes del PP proceden de la Santísima Trinidad conformada por conservadores, demócrata-cristianos y liberales. Cualquiera desde fuera y desde el desconocimiento quedaría desconcertado por el hecho de que un partido aglutine a los primeros y segundos con los últimos. Pero predominan los conservadores. Tienen un 14,2% de votantes que no saben su ideología y un curioso 6% de apolíticos. Porque se apolítico y votar a un partido es curioso. El del PP no es el único caso, pero esto hace que un 20% de votantes del PP no tengan ideología definida. A esto hay que sumarle la divertida circunstancia de que el 15,6% de los votantes del PP el 20-N se declaran progresistas, socialdemócratas, socialistas, comunistas o nacionalistas. Por lo que entre el PP hay un importante colectivo con una caraja ideológica digna de mención.

Dentro de los votantes del PSOE no sorprende que casi la mitad se declaren «socialistas», otra cosa es éstos sepan lo que es el socialismo, más que nada teniendo a elegir también la opción socialdemócrata. Claro ejemplo de cómo la ideología y el partido se han mezclado confundiendo al votante medio. También tienen un 12,10% de votantes que «no saben», menos apolíticos que el PP y casi un 4,5% de conservadores y demócratas cristianos que debían ir fumados el día de la encuesta o el de las elecciones o los dos días. El PSOE también parece tener un grupo de votantes significativo con cierta caraja ideológica, algo menor al PP, si obviamos debates nominalistas con esto socialismo.

Existe la percepción de que cuánto más minoritario es el partido, más claro lo tiene su votante. IU es el ejemplo perfecto de cómo esta afirmación puede ser cierta y falsa al mismo tiempo. Como es de esperar la mayoría de votantes se declaran comunistas, conviviendo con socialistas, socialdemócratas, progresistas y liberales, aunque sobre éstas dos últimas a muchos le puedan hacer dudar si pueden ser atribuidas a este partido. Tienen un grupo de personas que «no saben» algo menor a PSOE o PP, un grupo de apolíticos incluso por encima del PP y una proporción parecida de despistados conservadores y demócratas cristianos parecida a la existente entre los votantes del PSOE. No representan una gran mejoría respecto a los anteriores.

Debo reconocer el hecho de que UPyD era el partido del que más me interesaban los resultados. Esa transversalidad, ese no ser «ni de derechas-ni de izquierdas»… pero a la vez ser ese partido minoritario que parece girar sobre un eje común, hace que los resultados fueran interesantes. Este partido cumple sin dudas sus expectativas previas, es capaz de darnos una bofetada de coherencia cuando nadie ni en primer ni en segunda opción vota a UPyD siendo «nacionalista». También es capaz de agrupar algo mejor a posiciones contrarias como liberales vs conservadores, demócrata-cristianos vs socialistas y parecidas. Tiene una proporción de gente que desconoce su propia ideología más parecida a IU que a PSOE o PP. Pero también tiene una proporción mayor de «apolíticos» que sumada los que «no saben» casi iguala a su colectivo mayoritario: el progresista. ¡Tiene hasta comunistas! Así que UPyD parece lo que se esperaba, un grupo más heterogéneo que el resto con un significativo número de personas que han quedado seducidas por su carácter de novedad, lo que atrae a más colectivos «despistados».

A nadie le debería sorprender que los votantes de CiU sean nacionalistas, tanto en primera como en segunda opción. Tienen un colectivo que «no sabe» bastante bajo. Aunque llama poderosamente la atención que tenga tan pocos demócrata-cristianos. Tiene un 10,1% de «apolíticos» en primera opción que se declaran nacionalistas en segunda. Mola primero ser apolítico, luego nacionalista y luego votar a CiU. También tiene un apreciable número de socialistas-socialdemócratas-progresistas.

Por desgracia con CIU termina la disgregación por partidos, con lo que queda un grupo de «Otros» totalmente heterogéneos que agrupa mayoritariamente a nacionalistas de PNV o BNG y ecologistas de EQUO o Verdes, con apolíticos y votantes de partidos extraparlamentarios.

No por ser el 1% de los encuestados dejo atrás a aquellos que no tenían edad para votar el 20-N. No nos ofrece demasiado el dato, pero aquí queda.

El votante nulo es tan extraño como su opción elegida en las elecciones. En primera opción se declaran progresistas (no sé qué tiene de progresista el voto nulo) o apolíticos (esto es más coherente) o dentro de ese «otras respuestas» donde cabe todo tipo de ideologías exóticas y gente fundamentalista. Pero a la vez en segunda opción hay un significativo número de ecologistas y conservadores. También es notable en primera opción el «no sabe» o «no contesta» sea parecido al de los votantes de partidos y alejado de lo que se supondría para este colectivo.

El primo del votante nulo, el votante en blanco, lo tiene algo más claro. Suele ser apolítico o no saber su ideología. Destaca que en unas elecciones con las del 20-N, en las que el PSOE se llevó un gran castigo, el % de votantes en blanco es similar en conservadores que en la suma socialistas-socialdemócratas en primera opción.

También me sorprende a tenor de estos datos el abstencionismo de socialistas, socialdemócratas o progresistas no estén juntos muy por encima del de aquellos que se declaran conservadores. De hecho a todos les ganan los liberales, si eximimos a los apolíticos y los que «no saben» que como era de esperar son los mayoritarios.

Aunque no se lo crean, hay un 2% de encuestados que dicen no recordar lo que votaron el 20-N. Otra cosa es que sea cierto. Lo gracioso es el hecho de que algunos sí se acuerdan de su ideología principal y secundaria.

Por último nos quedarían aquellos que no quisieron contestar qué votaron, con la curiosidad de que no pocos sí declararon ideología, sobre todo principal.

Estos son los resultados, cuya interpretación es bastante compleja y cada uno lo podemos leer de manera distinta. Seguro que si me lo vuelvo a mirar escribiría otra cosa. Dejo a los lectores el ejercicio de hacer su propia interpretación de estos resultados del CIS, porque el tema ofrece cierto debate.

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6 respuestas a ¿Nuestra ideología coincide con nuestro voto?

  1. aitorcarr dijo:

    Reblogged this on Blog de Aitor Carr.

  2. aitorcarr dijo:

    Muy interesante. He mirado de rebloguearlo a mi blog para hacer difusión. Espero que te parezca correcto. No lo he hecho nunca antes y lo hicieron hace poco con mi blog. Saludos

  3. Juan L. Pérez dijo:

    El CIS interpreta que aquel que responde a sus preguntas es una persona ideológicamente formada, madura. No siempre es así. ¿Cómo si no, podríamos entender que una persona que se define apolítica, vote o tan siquiera conozca el trabajo de un líder político? O quizá deberíamos interpretar que en verdad apolítico no habría nadie, en cuyo caso, tal dato sobraría. Además observo que en el cuestionario hay fallas de sesgo. Un votante de IU, por ejemplo, puede ser un votante ecologísta (recordemos que IU concurre a elecciones en coalición con LV) y tal hecho no se recoge/interpreta en el cuestionario. Así mismo, para realmente conocer cuál es la verdadera ideología del entrevistado habría que proceder,a su vez, a la realización de otro cuestionario. La verdad es que el estudio realizado por el CIS no termina de convencerme.

    Un saludo y gracias por la entrada.

    • Pedro dijo:

      El sentido de la entrada coincide con la idea que lanza en el comentario, ¿estámos formados ideológicamente? El CIS no debe interpretar ni dejar de hacerlo pues no puede y no debe. Sólo debe seleccionar su muestra y hacer la encuesta.

      Por otra parte mucha gente que se declara apolítica en realidad es apartidista. No están muy de acuerdo con el conjunto de partidos que existen y se declaran apolíticos. Aunque esto no quitaría que pudiera votar a un partido por diversos motivos aparte de los ideológicos. Pero apolíticos, realmente apolíticos yo creo que hay pocos.

      Al no ser en sí un estudio sobre este aspecto, sino que son dos preguntas dentro del barómetro, se deja muchas cosas en el tintero. Siguiendo con el ejemplo del votante de IU, éste puede ser comunista, socialistas, socialdemócratas, liberal, ecologista o feminista. Pero al sólo poder elegir dos opciones puede que un socialista-ecologista-feminista tenga que hacer desaparecer una opción. De todos modos IU es el partido que tiene en segunda opción mayor número de ecologistas: 11%.

      Efectivamente esto no es un estudio específico, son un par de preguntas que el CIS hizo dentro del barómetro y se queda muy coja para sacar muchas conclusiones. Como bien dice y es parte de la idea de la entrada muchos no tenemos muy clara nuestra ideología.

      Saludos y gracias por el comentario.

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